Divaguemos

¿Qué haces cuando el pasado de una persona no te involucra?
¿Qué haces cuando éste hace apariciones fugaces y dolorosas?
¿Cómo pedirle que evada y relegue su pasado sólo por ti?

El sentimiento de dolor siempre me ha parecido uno de los sentimientos más animales junto al de furia, cada que me siento adolorida o herida vienen a mi, imágenes de perros abandonados, apaleados por la vida, hambrientos de empatía, flacos de calor humano y roñosos por los acercamientos malsanos. Los ojos de sufrimiento y angustia que sólo ellos saben mostrar.
No enmascaran su dolor, simplemente lo muestran.
Así me siento.

Quizá por ser mujer, mis sentimientos son extrapolados por cuestiones hormonales, eso dice mi ginecóloga, pero esta respuesta no satisface a mi ser racional que se niega a ser manipulado por ellas.

No conocía la complejidad de las relaciones humanas, de hecho siempre me mostré reacia a participar en ellas, a pesar de que mi madre de manera no insistente, me aconsejaba a probarlas.

Fue hasta que por simple y llana casualidad las cosas se dieron. Sí, y no es un alardeo ni quiero acudir a la suerte como estratagema para evadir responsabilidades. O quizá por el contrario, por evadir responsabilidades simplemente deje que las cosas pasarán y siempre justifiqué las cosas con un "¿porqué no? ¿qué puedo perder?"

Hasta que llego el punto donde: dolió, perdí y me siento sin poder decir "No pasa nada, a lo que sigue"

Es difícil entender que todo esto es necesario y hasta sano para llevar una vida completa. Una vida que se pueda decir bien vivida. Imagina llegar a la vejez y decir que nunca has llorado, o nunca has perdido, o nunca me deje embaucar por el amor. ¿Es una vida vacía o perfecta?

Por el momento son sólo pretextos para verle el lado sesudo al sentimiento.

Quiero un abrazo, un apapacho, palabras de aliento y un chocolate caliente.
Quiero que alguien diga que vale la pena.

Quiero.